Conectividad digital: Priorizada en la Estrategia Global Gateway de la UE

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La UE, el principal donante mundial para el desarrollo, elabora su agenda para la digitalización¹ sobre la base del exitoso trabajo de los profesionales del desarrollo. La introducción y aplicación de la estrategia Global Gateway de la UE para las asociaciones internacionales presenta todo un nuevo conjunto de oportunidades para todos los implicados. Aprovecha las habilidades increíblemente valiosas de la comunidad de desarrollo para moverse por diferentes marcos regulatorios y ambientes de negocios e impulsar significativamente las alianzas internacionales. En el marco de Global Gateway (la política de referencia de la UE), la conectividad digital ocupa un lugar central en la estrategia de inversión diseñada para fomentar el desarrollo sostenible basado en valores para los países socios. El Global Gateway, que se presenta como una adición inclusiva al Acuerdo de París, los ODS, el Pacto Verde Europeo y las iniciativas de la Agenda 2030, refuerza el compromiso de la UE de generar un desarrollo estable y a largo plazo con un alto valor intrínseco para sus socios. Se dará prioridad a las inversiones que promuevan infraestructuras inteligentes, éticas, ecológicas, limpias, sostenibles y seguras que favorezcan el crecimiento económico mundial.

1. Centros de datos sostenibles

Un Centro de Datos Sostenible, también conocido como Centro de Datos Ecológico o Green Data Centres, no tiene sistemas obsoletos y utiliza tecnologías más nuevas y eficientes de ahorro de energía para transportar el flujo de datos. Ha habido un enorme aumento en el consumo de energía de los centros de datos, impulsado por la acción gubernamental y el aumento de la conciencia pública, el crecimiento exponencial de estos centros y el uso de Internet.

Se ha incrementado la presión sobre las empresas para que apliquen una política ecológica que contrarreste el impacto medioambiental y los costes energéticos en aumento. Como resultado, el desarrollo de los centros de datos sostenibles desde el punto de vista medioambiental y económico se ha convertido en un elemento fundamental.

2. Diseño de infraestructura inteligente

El reparto de la infraestructura de telecomunicaciones entre los proveedores está aumentando en la industria de las telecomunicaciones, donde los competidores se están convirtiendo en socios para minimizar sus inversiones en expansión debido a la economía de escala de la industria de las comunicaciones. Como resultado, es vital construir una cultura de la infraestructura. Dependiendo del contexto normativo y competitivo de cada país, el grado y el método para compartir la infraestructura pueden diferir y se ve influenciado en gran medida por el alcance de la conectividad digital en los países³ socios. Para que el diseño inteligente de la infraestructura sea eficiente en los países socios, se debe alcanzar un consenso: desde la reducción de costos, el acceso a los derechos de paso, la solución de controversias y la coordinación entre las autoridades públicas. Naturalmente, la regulación surge como un subproducto de mantener una aplicación coherente de las políticas en todo el territorio de un país⁴. Si bien los acuerdos para compartir infraestructuras siguen siendo relativamente lentos, siguen siendo la política preferida de la UE para ayudar a acelerar la inversión en las redes de próxima generación. En el Pacto Verde de la UE existen disposiciones claras para garantizar que los países socios se beneficien de la política de crecimiento de la UE y que esta se convierta en el primer continente neutral en materia climática para 2050.

3. Cerrar la brecha digital

El término «brecha digital» se utiliza para describir las disparidades en el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y en su utilización, en particular las deficiencias en el acceso a los servicios digitales basados en Internet y en su utilización. La ubicación geográfica (por ejemplo, urbana y rural), el sexo, la edad, el nivel de conocimientos, el tamaño de la empresa, y, en general, los diferentes grupos vulnerables de la sociedad pueden contribuir a que se den esas brechas digitales. La expresión «brecha de conectividad» se refiere a las disparidades en el acceso y la utilización de servicios de banda ancha de alta calidad a niveles asequibles en zonas de baja densidad y para grupos desfavorecidos en comparación con la población en general. Todos estos factores aumentan las crecientes y legítimas preocupaciones de que las nuevas tecnologías puedan alterar empresas enteras, amplíen las desigualdades existentes en los ingresos y conduzcan a una mayor concentración del poder y la riqueza.

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La población sin conexión del mundo se enfrenta a limitaciones que incluyen problemas de alfabetización, asequibilidad, género, desigualdad de ingresos y accesibilidad, mientras que el lado de la oferta se enfrenta a la demanda de disponibilidad, menores costos regulatorios y un menor retorno de la inversión (ROI) a medida que discurre por los filtros de las políticas estatales. Sin embargo, la UE está a la altura del reto de ayudar a las industrias con TIC débiles y a los sectores de servicios de los países socios en desarrollo a convertirse en potencias de nivel mundial. Es por eso por lo que la fórmula ganadora de la UE para implementar la conectividad digital en los países socios combina la provisión de servicios, la competitividad internacional, la portabilidad, la compartición de infraestructura y emplazamientos y el marco de licencias. Dado que la regulación de las TIC ha evolucionado a un ritmo mucho más lento que las tecnologías digitales, la conectividad digital presenta un importante desafío para las formas de legislar «tradicionales» de los gobiernos. En consecuencia, la brújula digital de la UE fomenta la adopción de protocolos menos específicos para cada sector en beneficio de políticas integrales de inclusión, innovación, creación de empleo, crecimiento, energía y cuestiones medioambientales en consonancia con las normas internacionales.

Oportunidades y desafíos

Si bien la distribución exponencial y la ampliación de las tecnologías y servicios digitales tiene importantes repercusiones mundiales, trae consigo nuevos peligros y dificultades, al tiempo que genera igualmente oportunidades para el desarrollo sostenible y la prosperidad inclusiva.

A medida que evolucionen las tecnologías digitales, se encontrarán soluciones a los actuales peligros de conectividad, como la imparcialidad y el sesgo, las noticias falsas y los temores en torno a la Inteligencia Artificial, el control estatal, la privacidad, la vigilancia masiva y otros hostigamientos que amenazan con dañar la estabilidad de nuestras democracias.

Sin embargo, los beneficios de la conectividad digital superan los obstáculos y son visibles a través de su impacto en el PIB, el aumento de la productividad, la innovación, las oportunidades en sectores económicos y servicios públicos claves y como motor social y económico. A la vanguardia de la tecnología y el cambio social, la UE aboga por un futuro digital en el que el desarrollo de una tecnología fiable fomente una sociedad próspera, abierta y democrática.

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1 https://europa.eu/capacity4dev/results-and-indicators/digitalisation &n…;

2 La formación fue organizada entre los días 19 y 27 de abril de 2022 y fue impartida por la Unidad F5 de INTPA (Ciencia, Tecnología, Innovación y Digitalización) en el marco del programa de Apoyo Metodológico y de Intercambio de Conocimientos a las Intervenciones Externas de la UE (MKS), gestionado por la Unidad D4 de INTPA.

3 Los estudios han determinado que las políticas adecuadas para compartir la infraestructura, el cumplimiento de las normas medioambientales y los objetivos de eficiencia permiten ahorrar entre el 20 % y el 30 % de los costes de implementación de la infraestructura. Entre los ejemplos de infraestructura de bajo impacto se incluyen: cables ópticos submarinos, excavación de zanjas (siguiendo recomendaciones técnicas para minimizar el impacto en el medio ambiente por la construcción de micro zanjas), computación en la nube y centros de datos sostenibles, entre muchos otros instrumentos.

4 Un estudio de caso exitoso en Brasil trae evidencia de tal esfuerzo comunitario. En 2020, una iniciativa brasileña liderada por las bases, dirigida a las autoridades locales y los cuerpos legislativos, desafió las restricciones legales y regulatorias obsoletas, o en algunos casos inexistentes, que obstaculizaban la distribución y la densidad de antenas en los 5.565 municipios de la nación. Esta oportunidad ha dado lugar a un decreto llamado Lei das Antenas (Ley de Antenas) que establece, entre otras directivas, incentivos para el despliegue de infraestructuras, una subvención constructiva y la gobernanza general del sistema. Esta ley establece las normas generales para la implementación y el uso compartido de la infraestructura de telecomunicaciones en todo el país, facilitando el despliegue de la infraestructura móvil.