Skip to main content

This article is also available in English.

El mundo celebra el aniversario de la Declaración de los Derechos del Niño adoptada el 20 de noviembre de 1959 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Aunque una de cada tres personas en el mundo es menor de edad, la mayoría de las sociedades todavía subestiman la opinión de los niños y los adolescentes. Sin embargo, jóvenes activistas como Greta Thunberg y Francisco Vera1 demuestran que –para un mundo mejor– sus voces importan.

La contribución proactiva de la región de América Latina y el Caribe (ALC) en la protección de niños y jóvenes no es una novedad. Norberto Liwski, ex vicepresidente del Comité de Derechos de los Niños de la ONU, y miembro de la delegación argentina para la Convención sobre los Derechos del Niño, explica: «La Convención, y en particular los artículos 7 y 8, integran los debates y necesidades actuales de la región después de un período oscuro en nuestra historia. Especialmente relacionado con el registro y la identidad de los niños.»  

Esta Convención, la Resolución 836(IX) de las Naciones Unidas y la Acción de la UE sobre los derechos de los niños son algunos de los instrumentos disponibles para proteger y defender a una de las comunidades más vulnerables de nuestras sociedades: los niños y los adolescentes2. Además, la coalición entre autoridades locales, organizaciones de la sociedad civil y fundaciones es esencial para la ejecución de programas e iniciativas que afectan positivamente a niñas y niños en este contexto.

Un ejemplo de ello es el proyecto conjunto de la UE , Tejiendo Redes Infancia en la región de ALC3. El proyecto contribuye a cambiar las políticas públicas y presupuestarias; desafía las estructuras sociales y culturales y faculta a la participación directa de niños y niñas para articular la conciencia política.

Al igual que los movimiento globales Me too (yo también) o viernes por el futuro (o Fridays for Future, FFF, en inglés), este movimiento ha ampliado su ámbito geográfico gracias a su presencia digital. Hasta ahora, está presente en 20 países de ALC4, sacudiendo algunos de los pilares de nuestra sociedad a través de hashtags y otras herramientas interactivas.

Mejores prácticas de Tejiendo Redes Infancia:

  1. Potenciación del diálogo intergeneracional: para facilitar la comprensión y promover soluciones a largo plazo;
  2. Fortalecimiento de las coaliciones que participan en el proyecto: para empoderar y unir a las partes interesadas para que aborden los problemas y vinculen las prioridades;
  3. Utilización de los medios de comunicación y las redes sociales: para promover una acción colectiva que vaya más allá del posicionamiento político.

 

1. Potenciación del diálogo intergeneracional

Tejiendo Redes Infancia tiene sus raíces en el diálogo intergeneracional. Juan Martín Pérez García, coordinador regional del proyecto, explica: «Nuestra sociedad sigue el culto a la edad adulta. Las niñas y los niños no cuentan como responsables en la toma de decisiones. Los oímos, pero no escuchamos sus demandas.» Pero, continúa, «el diálogo intergeneracional no reniega de los adultos, sino que reconoce el valor de nuestra contraparte, independientemente de la edad que tenga esta persona.»

Fernando, un activista mexicano de 14 años de edad con más de cuatro años de experiencia en personas desaparecidas, está de acuerdo con Juan Martín Pérez García, «no es fácil remodelar hábitos o costumbres arraigadas, pero estar abierto a escuchar otras voces promueve el respeto y la diversidad.»

«Tenemos otras opiniones y diferentes orígenes, pero estar en desacuerdo no es un obstáculo. Juntos podemos crear oportunidades a partir de los desafíos actuales», añade la activista hondureña de 15 años, Francis.

Norberto Liwski, complementa: «Es un proceso dinámico y productivo en el que no sólo estamos reconstruyendo nuestra memoria colectiva del pasado, sino también construyendo nuevas estrategias políticas y culturales para todos.»

La COVID-19 tiene efectos profundos e inmediatos tanto en niños como en adolescentes. Sin embargo, según Juan Martín Pérez García, la pandemia también ha representado una oportunidad para aprender unos de otros. «Los casos de teletrabajo y de aprendizaje en línea fueron posibles en la mayoría de los casos gracias a la comprensión de la tecnología por parte de los jóvenes.» En su opinión, «si no hubiera sido por la experiencia técnica de los jóvenes, los padres no habrían podido trabajar de manera virtual. Las familias que aceptan este diálogo intergeneracional han fortalecido sus vínculos y se han vuelto más resilientes.»

2. Fortalecimiento de las coaliciones que participan en el proyecto

El objetivo de Tejiendo Redes Infancia es fortalecer la participación activa de grupos organizados de niñas y niños para potenciar las redes nacionales involucradas en el proyecto. Con esta finalidad, el proyecto ha organizado formaciones y talleres de capacitación. Juan Martín Pérez García dice: «Las instituciones necesitan un cambio sistemático para evolucionar y progresar. Sin el empoderamiento y el reemplazo de su personal, las organizaciones se convierten en estructuras verticales y jerárquicas.»

En este contexto, Juan Martín Pérez García reconoce la importancia del apoyo técnico recibido por los socios europeos para establecer un modelo de consulta y evitar así conflictos institucionales y facilitar la mediación profesional. Este apoyo establece una nueva dinámica en la que las agendas de los diferentes movimientos están interconectadas y, por consiguiente, abordan los desafíos actuales.

«Invitamos a niños y jóvenes a que contribuyan como expertos en debates de política pública con otras autoridades en la materia. Esto cambia paradigmas, ya que con frecuencia su contribución se limita a la de ser víctimas del proceso», añade Juan Martín Pérez García. La acción de promoción de estos niños y niñas incluye su participación en espacios internacionales como el Segundo Foro Interamericano sobre Sistemas Nacionales para la Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, entre otros.

La participación activa de los jóvenes en una amplia gama de temas ayuda a ampliar el movimiento y a compartir agendas con otros movimientos. Esto da como resultado que se aborden desafíos como los derechos de las mujeres y las niñas y el medio ambiente, y se trabaje conjuntamente en pro de objetivos comunes. O, como dice Fernando, «juntos generamos conocimiento.»

«Tejiendo Redes Infancia se basa en las sinergias existentes de las redes dentro de la región, pero lo más importante es que esto ha creado nuevas agendas con otras partes interesadas», dice Norberto Liwski.

Francisco está de acuerdo, «Venimos de diferentes países y trabajamos en diferentes temas, pero todos queremos lograr el mismo objetivo.»

3. Utilización de los medios de comunicación y las redes sociales

La COVID-19 ha forzado el cambio a lo digital en muchos proyectos e iniciativas de desarrollo; Tejiendo Redes Infancia no es una excepción. Sin embargo, la pandemia ha supuesto una oportunidad para que el proyecto fortaleciera su alianza estratégica con las principales empresas digitales, como Facebook, Instagram, Twitter y Google, para difundir sus ideas.

Al igual que otros movimientos sociales, Tejiendo Redes Infancia utilizó hashtags en sus actividades, tales como los 130 seminarios #NiñezPrimero, con más de seis mil puntos de vista en 35 países de la región de ALC y Europa.

Aunque hay un énfasis específico en los canales utilizados, el contenido es igualmente importante. «Los niños y las niñas fueron fundamentales para comprender y debatir cuestiones complejas en nuestras sociedades; atrayendo a padres, instituciones, organizaciones y maestros, entre otros», explica Juan Martín Pérez García. Esta participación activa de los jóvenes llevó a la celebración de 14 seminarios web, creados exclusivamente por 40 menores de edad como Fernando o Francis.

«Tejiendo Redes Infancia se atrevió a discutir temas complejos evitados por muchos otros, como la distribución desequilibrada de las vacunas COVID-19. Este enfoque proactivo y valiente los puso a la vanguardia de tantos otros temas y demostró su compromiso con la sociedad», dice Norberto Liwski.

De nuevo, este proyecto fue pionero en la creación de Ollin.TV, un canal de televisión colaborativo, que pretende ser una fuente fiable para aquellos interesados en el periodismo centrado en los niños y producido por estos. «No recibimos instrucciones sobre cómo decir cosas o qué contenido producir. Somos reporteros. Nosotros mismos llevamos a cabo las investigaciones y entrevistas», dice Francis con orgullo. Fernando, actualmente estudiando periodismo y derecho en una universidad de México, está de acuerdo y añade, «Soy moderador y ponente en las actividades de #NuestraVozCuenta y #NiñezObserva de Tejiendo Redes Infancia. Es una gran oportunidad para poner en práctica lo que estoy aprendiendo en la Universidad.»

El proyecto está concluyendo después de cinco años de implementación, pero el movimiento no se detiene aquí. «Somos una gran familia que aporta cambios a la sociedad, y debemos seguir haciéndolo», dice Francis. Fernando ya está pensando en ampliar la red, «en la región de América Latina y el Caribe, la conectividad no está garantizada. Tenemos que pensar en cómo llegar a los niños y jóvenes en zonas remotas sin Internet o incluso sin electricidad.» Norberto Liwski está de acuerdo y recomienda a otros profesionales del desarrollo que «nuestro enfoque debe centrarse en abordar los desequilibrios en nuestras sociedades. Estas son la verdadera fuente de discriminación.»

Haga clic en el botón de reproducción siguiente para ver nuestro video sobre Tejiendo Redes Infancia

¿Ha participado en intervenciones relevantes para la promoción de los derechos de los niños? ¿Cuál fue su enfoque?

¿Se enfrentó a algún desafío? Y, en caso afirmativo, ¿cómo lo superó?

Deje sus comentarios a continuación.

More about Tejiendo Redes Infancia

 

Tejiendo Redes Infancia promueve la creación de espacios en los que todos los participantes reflexionen hasta qué punto las medidas adoptadas por los Estados -desde la firma de la Convención sobre los Derechos del Niño hasta el presente- han permitido un cambio real en la calidad de vida de las niñas, niños y adolescentes de la región.

Entre las cuestiones prioritarias supervisadas se encuentran:

• Violencia

• Adolescentes en conflicto con el derecho penal

• Derecho a la salud

• Derechos en educación

• Derecho a la identidad

• Derecho a vivir con la familia

• Ciudadanía digital y seguridad en Internet

• Trabajo, explotación económica y sexual

• Inversión en infancia y adolescencia

• Agenda 2030 y Objetivos de Desarrollo Sostenible

El Plan Estratégico desarrolla los mecanismos para influir en las políticas públicas, la legislación, la inversión pública y las prácticas de los agentes estatales vinculadas a la garantía de los derechos de las niñas, los niños y los adolescentes. Este plan ha sido desarrollado sobre las siguientes bases:

• Recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño (CRC-ONU)

•  El Examen Periódico Universal de cada uno de los Estados

• Procesos de firma y ratificación del Tercer Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño.

• Avances en la aplicación de las recomendaciones del Estudio de las Naciones Unidas sobre la Violencia contra los Niños y Adolescentes.

• El Sistema Interamericano de Derechos Humanos.

• Implementación de los Sistemas Nacionales de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes en la región.

• Tendencias políticas, económicas y sociales prevalecientes en los países.

Vídeos relacionados:

 

Créditos: Video © Capacity4dev |  Fotografía © Derechos Infancia México A.C. / Tejiendo Redes Infancia, 2021

1 Fernando Vera es un reconocido activista Colombiano de 12 años. 

2 Todavía hay margen para mejorar la forma de garantizar que los niños y adolescentes se salven de la pobreza, la discriminación y la negligencia. Lea el informe de Save the Children 2021 Global Childhood Report (Informe mundial sobre la niñez 2021).

3 En 2016, la Red por los Derechos del Niño en México y la Unión Europea firmaron un Acuerdo Marco de Asociación por el que se establece el proyecto Tejiendo Redes Infancia con el apoyo financiero de la UE, la Asociación Sueca para el Desarrollo Internacional (Sida, en su acrónimo en inglés) y Save the Children.

4 Tejiendo Redes Infancia está implementado por coaliciones nacionales en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.